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Comenzamos curso
 

 

 

 

 

XXVII domingo del Tiempo Ordinario

Evangelio

según san Marcos (10,2-16):

En aquel tiempo, se acercaron unos fariseos y le preguntaron a Jesús, para ponerlo a prueba: «¿Le es lícito a un hombre divorciarse de su mujer?»
Él les replicó: «¿Qué os ha mandado Moisés?»
Contestaron: «Moisés Permitió divorciarse, dándole a la mujer un acta de repudio.»
Jesús les dijo: «Por vuestra terquedad dejó escrito Moisés este precepto. Al principio de la creación Dios «los creó hombre y mujer. Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne.» De modo que ya no son dos, sino una sola carne. Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.»
En casa, los discípulos volvieron a preguntarle sobre lo mismo. Él les dijo: «Si uno se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra la primera. Y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio.»
Le acercaban niños para que los tocara, pero los discípulos les regañaban. Al verlo, Jesús se enfadó y les dijo: «Dejad que los niños se acerquen a mí: no se lo impidáis; de los que son como ellos es el reino de Dios. Os aseguro que el que no acepte el reino de Dios como un niño, no entrará en él.»
Y los abrazaba y los bendecía imponiéndoles las manos.

Palabra del Señor
 

Comentario del Evangelio

San Juan Pablo II (1920-2005)

papa

Homilia del 12 de Octubre de 1980

"Ellos ya no son dos; no son mas que uno"

"Lo que Dios ha unido, el hombre no lo debe separar" Esta expresión "contiene la grandeza esencial del matrimonio y al mismo tiempo la intensidad moral de la familia" Nos deseamos hoy esa magnitud y esa dignidad para los todos los esposos del mundo; deseamos esa intensidad sacramental e integridad moral para todas las familias. ¡Y lo pedimos para el bien del hombre!. Por el bien de cada hombre. El hombre debería llegar a la vida sólo a través de la familia. Y la familia debe ubicarse en las bases mismas de todo esfuerzo a fin de que nuestro mundo humano sea para siempre mas humano. La persona no puede escapar a estas solicitudes: ninguna sociedad, ningun pueblo, ningun sistema; ni el Estado, ni la Iglesia, ni el mismo individuo. El amor, que une a un hombre con una mujer como esposos, es al mismo tiempo don y mandato....el amor es don: "el amor procede de Dios y todo el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios" (1Jn 4,7)Y al mismo tiempo el amor es un mandamiento, el mas grande amor..."Amarás" (Mt. 22,37-39). Obedecer al mandamiento del amor nos llevará a realizar todas las obligaciones de la familia cristiana. A fin de cuentas, todas se reducen a estas: la fidelidad y la honestidad conyugal, la paternidad responsable y la educación. La "pequeña iglesia"-la Iglesia doméstica-indica que la familia vive en el espíritu del mandamiento del amor: su verdad interior, su esfuerzo cotidiano, su belleza espiritual y su fuerza...Si Dios es el amor El es accesible. Si nosotros destruimos esta estructura inseparable, donde habla el mandamiento de Cristo, entonces el amor del hombre se separará de sus raíces más profundas, perderá sus raíces de plenitud y de verdad, que son esenciales. Imploramos en favor de todas las familias cristianas, de todas las familias del mundo, para que les sea concedido esta plenitud y verdad en el amor, esa que evoca el mandamiento de Cristo.

 Leer el comentario del Evangelio todos los días de la semana  aquí

Salmo del Domingo ¡Temor bendecido, cuando es bien entendido! (Salmo 128)

R/. Que el Señor nos bendiga todos los días de nuestra vida

Dichoso el que teme al Señor
y sigue sus caminos.
Comerás del fruto de tu trabajo,
serás dichoso, te irá bien. R/.

Tu mujer, como parra fecunda,
en medio de tu casa;
tus hijos, como renuevos de olivo,
alrededor de tu mesa. R/.

Ésta es la bendición del hombre que teme al Señor.
Que el Señor te bendiga desde Sión,
que veas la prosperidad de Jerusalén
todos los días de tu vida. R/.

Que veas a los hijos de tus hijos.
¡Paz a Israel! R/.

Reflexión

Temor bendecido cuando es bien entendido. El temor de Dios es algo que desconcierta y preocupa. Seria terrible que Jesús nos dijera: "No te conozco", pero esa frase está en el Evangelio y es muy saludable para el alma meditar sobre el temor de Dios. Los salmos 112 y 128 nos introducen en el concepto bíblico del "temor de Dios". Quizá sea está una materia en la que reina cierta confusión. En primer lugar, es un error pensar que el temor de Dios es cosa del Antiguo Testamento. De hecho, el Nuevo Testamento no hace más que reforzar todo lo que se dice en el Antiguo Testamento. En segundo lugar, es también un error creer que la misericordia de Dios convierte el temor de Dios en algo ya superado. Eso sería producto de una visión parcial y sesgada del evangelio. Dios es justo y misericordioso a la vez, lo que impide una presunción de salvación basada en una falsa y abusiva idea de misericordia.

El evangelio está lleno de advertencias y estímulos para el arrepentimiento y la conversión antes de que sea tarde: “La paga del pecado es muerte” (Romanos 6:23), “Porque todos nosotros debemos comparecer ante el tribunal de Cristo (2 Corintios 5:10-11). “Y si invocáis como Padre a aquel que imparcialmente juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor durante el tiempo de vuestra peregrinación”. (Primera epístola de Pedro 1:17). “Y yo os digo, amigos míos: no temáis a los que matan el cuerpo, y después de esto no tienen nada más que puedan hacer. Pero yo os mostraré a quién debéis temer: temed al que, después de matar, tiene poder para arrojar al infierno; sí, os digo: a ése, ¡temed!” (Lucas 12:4-5).  "Después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: ¡Señor, señor, ábrenos! Mas él, respondiendo, dijo: De cierto os digo, que no os conozco". (Mateo 25:10-12)

Tener temor de Dios es síntoma de sabiduría, mientras que no tener temor de Dios es principio de necedad. No tener temor de Dios es síntoma de soberbia, arrogancia y falsa suficiencia. “La esencia de la necedad es no tener miedo de Dios, cuando hay motivos para asustarse de Él”. Por el contrario, “El principio de la sabiduría es el temor de Dios". (Proverbios 1,7), "Hijo mío, si recibieres mis palabras... entonces entenderás el temor de Dios, y hallarás el conocimiento de Dios…"(Proverbios 2:1-5)

El temor de Dios debe estar unido al amor a Dios para poder entenderlo. El temor entremezclado de amor te hace no tratar de huir de su Presencia. El temor no se confunde con cobardía. Es un sano miedo o temor de desagradarle, de no cumplir con su voluntad; pero también el amor tiene mucho que ver con esta actitud reverente y respetuosa. Este temor de Dios no nos hace alejarnos de El; como nos dice el apóstol Pablo,"no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre!" (Rom. 8:15). En lugar de alejarnos de El, nos acercamos a El: "Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro" (Heb. 4:16).

Temer y no temer, parece una contradicción. Son personas y situaciones distintas. Jesús le dice a Pedro no temas. Cuando Dios te llama te pide que no tengas miedo. Estar en gracia de Dios es incompatible con tenerle a Dios miedo horror o pánico. A medida que se crece en el amor crece la confianza, el respeto, la reverencia, la piedad, que es la perfección del temor de Dios. Los dones son instrumentos directos del Espíritu Santo.

Como dice el santo Juan Pablo II de este santo y justo temor, conjugado en el alma con el amor de Dios, depende toda la práctica de las virtudes cristianas, y especialmente de la humildad, de la templanza, de la castidad, de la mortificación de los sentidos. Recordemos la exhortación del Apóstol Pablo a sus cristianos: "Queridos míos, purifiquémonos de toda mancha de la carne y del espíritu, consumando la santificación en el temor de Dios» (2 Cor 7, 1). Invoquemos al Espíritu Santo a fin de que infunda largamente el don del santo temor de Dios en los hombres de nuestro tiempo.

Amen.


AVISOS MISAS DOMINGO 6 OCTUBRE 2024

- HOY LA COLECTA DEL PRIMER DOMINGO DE MES ES PARA LA PARROQUIA

- ESTA SEMANA HA COMENZADO LA ÚLTIMA ETAPA DEL SÍNODO, AHORA EN ROMA, REZAMOS CON ESTA ORACIÓN Y BENDICIÓN FINAL.

- EL SÁBADO 12, FIESTA DEL PILAR, TENDREMOS HORARIO FESTIVO: MISAS A LAS 9, 11, 1 Y 7 EN EL ROSARIO Y 12 EN SANTA MARÍA.

- YA ESTAMOS LLENOS PARA LA OFRENDA DE FLORES Y OS ANIMAMOS A PARTICIPAR EN EL ROSARIO DE CRISTAL, EL DOMINGO DÍA 13, CON LA PARROQUIA, QUEDAMOS A LAS 19’30 EN LA PLAZA JOSÉ SINUES (detrás del Teatro Principal). 



 

Comenzamos la catequesis de Infancia para las familias con niños en 2º de primaria.
La reunión de saludo y presentación con los padres será el jueves 26 de septiembre, a las 17’30h., en el HOGAR parroquial del Rosario (Pablo Gargallo, 71).
Este año la FICHA se rellena ONLINE con este código QR o en este enlace: https://forms.gle/4WMm1kpUE4LThc8G8 y también en papel en el despacho parroquial.

 



 

 

 
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En octubre recuperamos el horario normal de misas

 


 

XXIX domingo del Tiempo Ordinario

 

AVISOS MISAS DOMINGO 22 OCTUBRE 2023

ü

HOY ES EL DOMUND, TENÉIS LOS SOBRES Y LOS FOLLETOS EN LAS MESAS DE LA ENTRADA. REZAREMOS Y COMPARTIREMOS CON LOS MISIONEROS. EL SÁBADO 21 A LAS 20:00 ES LA VIGILIA DE LA LUZ DEL DOMUND EN LA PARROQUIA DEL SAGRADO CORAZÓN.

ü RESERVAD EL LUNES 23 A LAS 19 H. PARA EL ENCUENTRO DE GRUPO Y ASAMBLEA PARROQUIA DE INICIO DE CURSO EN EL HOGAR PARROQUIAL. TE ESPERAMOS PARA AYUDAR A PREPARAR EL NUEVO CURSO.

NO HA LLEGADO HOJA DIOCESANA PARA ESTA SEMANA, POR ESO OS PASAMOS LA HOJA DE LA DIOCESIS HERMANA DE HUESCA O EN ESTE ENLACE: https://app.box.com/s/5cmrdn7wkmmmcy5d88m8o3vy6i58q0np

 
Lectura del santo evangelio
 
según san Mateo (22,15-21):

En aquel tiempo, se retiraron los fariseos y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregunta.
Le enviaron unos discípulos, con unos partidarios de Herodes, y le dijeron: «Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad; sin que te importe nadie, porque no miras lo que la gente sea. Dinos, pues, qué opinas: ¿es licito pagar impuesto al César o no?»
Comprendiendo su mala voluntad, les dijo Jesús: «Hipócritas, ¿por qué me tentáis? Enseñadme la moneda del impuesto.»
Le presentaron un denario. Él les preguntó: «¿De quién son esta cara y esta inscripción?»
Le respondieron: «Del César.»
Entonces les replicó: «Pues pagadle al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.»

Palabra del Señor

REFLEXION DEL EVANGELIO

San Antonio de Padua (1195-1231)

franciscano, doctor de la Iglesia

Sermones para el domingo y las fiestas de los santos

«Haz brillar sobre nosotros la luz de tu rostro» (Sl 4,7)

     De la misma manera que esta moneda de plata lleva la imagen del César, igualmente nuestra alma es imagen de la Santa Trinidad, según lo que se dice en el salmo: «La luz de tu rostro está impresa en nosotros, Señor» (4,7 –LXX)... Señor, la luz de tu rostro, es decir, la luz de tu gracia que establece en nosotros tu imagen y nos hace semejantes a ti, está impresa en nosotros, es decir, impresa en nuestra razón, que es el poder más alto de nuestra alma y recibe esta luz de la misma manera que la cera recibe la marca del sello. El rostro de Dios es nuestra razón; porque de la misma manera que se conoce a alguien por su rostro, así conocemos a Dios por el espejo de la razón. Pero esta razón ha sido deformada por el pecado del hombre, porque el pecado hace que el hombre se oponga a Dios. La gracia de Cristo ha reparado nuestra razón. Por esto el apóstol Pablo dice a los Efesios: «Renovad vuestro espíritu» (4, 23). La luz de la que trata este salmo es, pues, la gracia que restaura la imagen de Dios impresa en nuestra naturaleza...      Toda la Trinidad ha hecho al hombre según su semejanza. Por la memoria se asemeja al Padre; por la inteligencia, se asemeja al Hijo; por el amor se asemeja al Espíritu... En la creación el hombre fue hecho «a imagen y semejanza de Dios» (Gn 1,26). Imagen en el conocimiento de la verdad; semejanza en el amor de la virtud. La luz del rostro de Dios es, pues, la gracia que nos justifica y que revela de nuevo la imagen creada. Esta luz constituye todo el bien del hombre, su verdadero bien, y le marca igual que la imagen del emperador está impresa en la moneda de plata.      Por eso el Señor añade: «Dad al César lo que es del César». Como si dijera: De la misma manera que devolvéis al César su imagen, así también devolved a Dios vuestra alma revestida y señalada con la luz de su rostro.

Amén
 
 
Salmo del Domingo ¡Todos los pueblos somos familia de Dios unidos en su alabanza! (Salmo 96)
 
R/. Aclamad la gloria y el poder del Señor

Cantad al Señor un cántico nuevo,
cantad al Señor, toda la tierra.
Contad a los pueblos su gloria,
sus maravillas a todas las naciones. R/.

Porque es grande el Señor,
y muy digno de alabanza,
más temible que todos los dioses.
Pues los dioses de los gentiles son apariencia,
mientras que el Señor ha hecho el cielo. R/.

Familias de los pueblos, aclamad al Señor,
aclamad la gloria y el poder del Señor,
aclamad la gloria del nombre del Señor,
entrad en sus atrios trayéndole ofrendas. R/.

Postraos ante el Señor en el atrio sagrado,
tiemble en su presencia la tierra toda;
decid a los pueblos: «El Señor es rey,
él gobierna a los pueblos rectamente.» R/.

Reflexión