Menu
Sínodo de los Obispos
Los Mosaicos de Rupnik
Textos fundamentales y Catequesis del Papa
Plan de Pastoral
Noticias de la Archidiócesis
Horarios Misa
Galería de Fotos
Actividades parroquiales
Despacho Parroquial
Responsables
Actividades
Correo
Noticias ACI Prensa
RECURSOS
Fotos

Debe tener habilitados los applets Java para ver las noticias de Zenit aquí.
Soplos del Espíritu, por Luis Alloza

 

 “EL ESPIRITU SANTO ACTUA EN NOSOTROS”

Una nueva columna en nuestra página web parroquial, que quiere recoger vuestras inquietudes y testimonios

 El mismo Cristo en el Evangelio usa también la imagen del viento para hablarnos del Espíritu Santo: "Jesús sopló sobre ellos y les dijo: Reciban el Espíritu Santo". La misma palabra espíritu significa, etimológicamente, viento: procede del latín, spíritus (del verbo spiro, es decir soplar). El vocablo hebreo, ruah, tiene el mismo significado. (viento, soplo de vida, soplo creador que aparece en la Biblia).Y la palabra latina que se usaba para decir alma era ánima, que a su vez viene del griego ánemos, viento.

En el sacramento del bautismo recibimos el Espíritu santo que nos hace participar de la naturaleza divina. Jesús resucitado ascendió al cielo y se reunió con el Padre, pero antes nos aseguró que no íbamos a quedar solos a nuestra suerte: “Y yo rogaré al Padre y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no lo ve ni lo conoce; pero vosotros lo conocéis, porque vive con vosotros y estará en vosotros.

Pero el Consolador, añade Jesús, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, os enseñará todas las cosas y os recordará todo lo que yo os he dicho.

Así pues, el Espíritu Santo actúa en nosotros, mediante inspiraciones, que, en la medida que somos dóciles a su influjo, nuestras almas despliegan sus “velas” dispuestas a recibir el soplo divino.

 

Ese “soplo del Espíritu” se concreta en cosas que nos ocurren y se nos ocurren y no se nos pasa por la cabeza quien es su verdadero autor.  En esta columna lo que pretendemos es descubrir en nosotros la acción del Espíritu y compartir con los demás nuestras experiencias.

Tenemos la certeza por la fe que Dios está con nosotros y que tenemos que estar atentos a los signos con que se nos manifiesta, que son muchísimos. Como dice Jesús: "Cuando veis que una nube se va levantando por el poniente, enseguida decís que va a llover, y en efecto, llueve. Cuando el viento sopla del sur, decís que hará calor, y así sucede. ¡Hipócritas! Si sabéis interpretar el aspecto que tienen el cielo y la tierra, ¿por qué no interpretáis entonces los signos del tiempo presente?"

 
< Anterior   Siguiente >